miércoles, 5 de abril de 2017

GHOST IN THE SHELL

Ghost in the Shell nos lleva al año 2029 en un mundo en el que los avances tecnológicos y los implantes cibernéticos están al orden del día, consiguiendo que la línea que separa a las máquinas de los humanos sea cada vez menor.
En ese universo se ha creado la Sección 9, un equipo del Gobierno que se dedica a combatir el crimen, tanto real como cibernético. Al frente de dicho destacamento está Major una ciborg, la primera de su especie...

La película de Rupert Sanders asombra por su estética, fotografía y puesta en escena; ofreciéndonos un regalo visual que demuestra el amor y la veneración con que se ha "homenajeado" al clásico original y su universo.  Mostrándonos una ciudad que parece estar más viva que los propios protagonistas que pasean por sus calles.

El guión es sencillo, se ha suavizando el argumento del film original pensando en el gran público. Quizá hay es dónde residan los problemas con parte de la crítica y sobre todo de los fans mas acérrimos a la película de 1995.
Mi opinión es que pese a tener una misma base y ser tan diferentes en fondo y "alma" los dos films me gustan.

Evidentemente el Ghost in the Shell anime es un clásico ya, que ha influido en mil y una películas y trajo a primera escena la estética Cyberpunk y éste ha de verse como una obra paralela, que coge y homenajea muchas cosas de su predecesor pero no intenta ni acercarse en sus más serias pretensiones.

El elenco principal está bastante acertado; destacando a una notable Scarlett Johansson (pese a esos andares..), a un perfecto Pilou Asbæk como Batou y a unos Takeshi Kitano, Michael Pitt, Juliette Binoche y Chin Han correctos en sus roles.

El Ghost in the Shell de 2017 es un espectáculo visual de casi dos horas que si vas con la idea de pasártelo bien en la sala no te defraudará.